martes, 2 de marzo de 2010

Me ha dado por prepararme para el Apocalipsis, ¿porqué no?

Pues si, amigos. Últimamente no hago más que oír aterradoras premoniciones de cómo la economía se va al carajo, de cómo todo el sistema se hunde, de preparar los bunkers con comida y municiones, la necesidad de ser autosuficiente… Total, que me he dicho a mí mismo ¿y porqué no?.

Y me he ido al súper (ya que aún no ha llegado el Apocalipsis, y puedo ser cómodamente apocalíptico en el mercadona y el lidl) y me he puesto a hacer mi “Despensa de Supervivencia”. Mirando aquí y allá en Internet (y mira que están raritos con las latas de atún en el foro de burbuja.info) he sacado varias conclusiones: hay que almacenar comida no perecedera, fácilmente consumible sin utilizar apenas energía, que sea compacta y cuyos envases te permitan la dosificación. Armas, botiquín de emergencia, semillas de todas las formas, tipos y tamaños, ropa, agua, municiones,...

Yo de las municiones paso, no vaya a ser que se me dispare la escopeta en el culo y tengamos un disgusto. Y de las pastillas potabilizadoras de agua también. Total, en mi sexto piso del bloque donde vivo no pasa ningún riachuelo cuya agua tenga que potabilizar, asi que…

Luego entramos en el apartado ropas básicas. Yo ya tengo chandal, que para un apaño me puede hacer el servicio apocalíptico. Y mis zapatillas de deporte (las que me compré para ir a correr los domingos hace un par de años y aún no he estrenado) están como nuevas, así que lo tacho de la lista.

Y en el apartado alimentos, pues no sé. Proteínas baratas y duraderas ya tengo, que me compre unas latas de atún y de mejillones para los aperitivos de navidad y aún no las he gastado. Y tengo botes de mermelada que me trae cada año mi madre, por eso de que no como mucha fruta. Así que cubierto también.

Total, que me he comprado doce docenas de paquetes de galletas maría y otras doce docenas de tabletas de chocolate. Hala, me he quedado tan ancho.

Ya estoy listo para el Apocalipsis. Sólo me queda rebuscar en mi piso un lugar adecuado para enterrar, esconder y preservar mi preciado tesoro de las hordas de hambrientos que puedan venir a robármelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario